lunes, 4 de noviembre de 2013

Poco a poco.

Cuándo las cosas empiezan a ir bien, se nota, después de estar más de un mes dando el 100% de tí mismo en todos los aspectos llega la esperada recompensa, o bueno, indicios de aquella recompensa que por muy pequeña que sea, notas que poco a poco vuelve a la normalidad, a cómo era antes.
Y es cuándo te das cuenta que todos sos lamentos, hostias contra la misma pared, "no puedo conseguirlo" retumbando en la cabeza, bajones y demás contras del camino, no son tan malos, y empiezas a disfrutar de todo ese esfuerzo, qué cómo bien sabía una parte de tí, lo conseguirías tarde o temprano, solo hacía falta creer en esa parte y en tí mismo para conseguirlo.
¡QUÉ LOS IMPOSIBLES SÓLO ESTÁN EN TU CABEZA!

sábado, 2 de noviembre de 2013

Actitudes contradictorias.

Cuándo pides opinión muchas veces es para quitarte algunas dudas o "desempatar" una situación. Por eso, muchas veces recurro a mis amigas, que son las que siempre miran lo mejor para mí, pero en este caso me tengo que aclarar yo.
Lo realmente jodido es cuándo tú misma estás ante dos pensamientos y no sabes por que camino tirar, porque no siempre el corto y el más sencillo son los que más nos convienen; pero tampoco nos conviene un camino lleno de obstáculos y que sabes que se va a hacer cuesta arriba y muy pesado.
Todos tenemos días malos, y quién diga que no, miente. Y por eso mismo hay veces que nos encontramos más fuerte que otros días. Remolinos de emociones. Entonces esa es mi situación, una parte de mí está dispuesta a darlo todo por conseguir mi objetivo, y sabe que si doy todo de mí, podré conseguirlo; pero hay otra... Que piensa que no merece la pena tanto esfuerzo, que también me merezco que se esfuercen por mí y que por mucho que haga, no va a servir para nada.
Malditas inseguridades...

viernes, 1 de noviembre de 2013

¿Y quién no?

Escribes algo importante a una persona, ves que no te contesta y dejas esa conversación un poco apartada para seguir hablando con más gente, y derrepente te llega su mensaje, y notas cómo los nervios se apoderan de ti, y parece que tu respiración y los latidos del corazón estén echando una carrera por ver quién va más rápido, ¿a quién no le ha ocurrido eso? Porque a mí me pasa continuamente y es una sensación a la que no te acabas por acostumbrar nunca. No se puede describir cómo mala, pero es...rara.
Y ahora me pregunto, ¿A quién no le ha pasado de esto que ves, bueno, la ves, ves a esa persona y ya todo lo malo como que ya no es tan malo y cambias de opinión? ¿A quién no le ha pasado que por una persona esté dispuesto a hacer las mayores locuras o cosas que nunca se habría atrevido ni a imaginar? ¿A quién no le ha pasado enamorarse de alguien imposible o a simple vista, fuera de su alcance?
Al final, todos tenemos muchas cosas en común, y entre ellas, los errores y los miedos, como tambien las lecciones. Pero si todos cometemos esas acciones y a algunos les sale bien, ¿por qué a nosotros no? Siempre hay una excepción o un porcentaje el cuál lo logra, pues partiendo de eso, hay que estar dispuesto a ser de ese porcentaje cueste lo que cueste, sin temor a nada. Pero sin intentarlo no se puede conseguir.

Lo siento.

Bueno, empezar una entrada ya pidiendo perdón no suena muy bien que digamos, y menos cuándo ese lo siento me lo tengo que aplicar a mi misma. Soy una de esas personas que creen que si se quiere y se intenta con todas tus fuerzas, se puede conseguir. Pero creo que estoy ante una excepción.
El por qué es muy sencillo, muchas veces había estado en una situación parecida o incluso peor, pero creo que ésta vez simplemente no se puede hacer más. Siempre he estado al pie del cañón en circunstancias parecidas y al final, gracias a eso, conseguía mi objetivo.
No me gusta perder a nada, cómo tampoco me gusta perder oportunidades o personas, pero ¿qué pasa si lo único que hago es darme de hostias contra una pared, qué por mucho que haga, va a seguir ahí? La opción mas lógica en este caso es abandonar, pasar de página, echar el freno.... Y por eso me tengo que disculpar conmigo misma, porque no soy de las que dejan las cosas así, y sí, hoy digo esto, pero sé que dentro de unos días puedo estar haciendo justamente lo contrario.
Pero en días cómo hoy es lo que siento... Y me da rabia porque uno de los actos más cobardes que hay, es el dejar atrás algo que quieres por creernos que es imposible de conseguir.
Digamos que esto es lo negativo de tirar la toalla en cualquier caso, pero también hay aspectos positivos.
Cómo el de dejar este tormento, ¿se puede dar todo sin recibir nada a cambio? Hasta ahora, sí, pero uno no sabe cuándo llegará su límite, asique ante la bipolaridad de hoy, que ya he dicho que tal vez dentro de uno, o varios días, habré podido cambiar de opinión, abandono temporalmente para, simplemente, observar y verlo desde otro ángulo. Porque cómo bien dicen algunos, basta con pasar de una cosa o persona, para que vuelva a tí.

jueves, 24 de octubre de 2013

Fuerza.

Se suele decir que las personas fuertes son aquellas que, van al baño, lloran y se secan las lágrimas para que nadie les vea ni sepan que estan verdaderamente mal, maldito hábito, ¿quien no ha hecho eso alguna vez? motivos sobran, ¿pero qué pasa con las personas que rompen a llorar delante de otras? algunos dirán que puede ser para llamar la atención, pero yo creo que eso también es ser fuerte, ya que te quedas expuesto, te ven débil, y lo peor, saben cuál es tu debilidad, eres un blanco fácil para todos aquellos que te quieran hacer daño. Asique hablar de ser fuerte es algo muy relativo.

miércoles, 23 de octubre de 2013

La despedida.

Hace dos días que me di cuenta de que sería la despedida definitiva, no te voy a engañar, aún tenía esperanzas de poder remontar esto, pero todo eso se me fue de la cabeza cuándo al saludarte, pasaste de mí cómo a una más de tantas de las que me habías hablado, y jode el tener que ser una más.
La despedida no ha sido cómo hubiese querido, pero me ha hecho pensar en lo que hemos sido y en lo que nos hemos quedado por ser.
Tal vez hayas sido una de esas personas que llegan a mi vida pero no para quedarse, y creo que es así, gracias a tí una parte de mi cambió para mejor, hiciste que en este tiempo, sonriera como pocas veces lo había hecho. Y lo más importante, me uniste mucho más a una persona, por eso pienso que la función de haberte conocido era esa, y te lo agradezco, tal vez no me haya podido quedar contigo, cosa que me arrepiento de haber jodido, pero me diste la confianza de una persona que sé que no se va a romper fácilmente.
Suelen decir que todas las despedidas son amargas y dolorosas, y lo segundo puede que tenga parte de razón, pero al recordar sólo me sale una pequeña sonrisa, qué se le va a hacer...

martes, 22 de octubre de 2013

Mala racha.

Una mala racha.... Es sólo una mala racha..... ¿Cuánto tiempo voy a tener que estar repitiéndome eso para sentirme un poco mejor?
Simplemente la situación me supera, no puedo más, puedes tener problemas con la familia, los estudios, las amigas, o por qué no, con el chico que te gusta. ¿Pero qué haces cuándo es por todo? ¿Cuál va a ser mi puto punto de apoyo ahora?
Y es cuándo pienso en el pasado, y veo que esta maldita historia se vuelve a repetir pero con otros personajes, la historia sin fin.
¿Y por qué no? Surgen de nuevo los miedos, miedo a quedarse sola de nuevo y con ello todos esos malditos sentimientos de culpa. Y piensas en los motivos, o mejor dicho, en las cosas que he jodido y sus razones.
Puede que sea mi carácter, tan fuerte y difícil de llevar, y a la vez tan insoportable; o puede que sea porque este tampoco es mi sitio; o porque simplemente, una vez que ya hay la suficiente confianza se empiezan a alejar por como soy en general.
Ahora toca meditar y pensar en lo que es más conveniente.

lunes, 21 de octubre de 2013

¿Y por qué no?

Tras una clase de filosofía ésta mañana, mis pensamientos se han aclarado, quién diría que una simple clase podría aportarme tanto hoy, ¿eh?.
Pues bien, va de los imposibles, incluso la palabra me suena raro, y yo me formulo una pregunta, ¿Vale la pena intentarlo? Uno de los ejemplos más claros ha sido el de hoy.
Pregúntate a ti mismo "¿crees qué podrá existir una justicia al nivel mundial para todo y todos?" Si la respuesta al igual que yo, es no, plantéate la siguiente: "¿Merece la pena intentar luchar por esa justicia?" Yo creo que la respuesta en este caso es evidente.
La "ecuación" general para esto digamos, sería la siguiente: ¿Por qué no intentar algo, que aparentemente el alcanzarlo vaya a costar más? ¿No sigue teniendo el mismo valor aquello por lo que luchamos que algo que sea más fácil de conseguir?
Es cierto, hay cosas que las dejamos por imposible, es más sencillo, pero aún siendo así, en mi manera de ver las cosas, se puede seguir intentando, tal vez no lo consigas, pero sí notarás ciertos cambios que con los brazos cruzados no hubiera sido posible.

domingo, 20 de octubre de 2013

A mi manera.

Muchas veces, dejamos de hacer cosas porque creemos que van a estar mal vistas o que luego puede dar lugar a repercusiones que no queremos o tememos. También puede ser porque nos aconsejan, pensando que es lo mejor para nosotros en ese momento, no hacerlo.
Pero llega un momento en que te cansas, te cansas de pensar que podría haber pasado si lo hubieras hecho o mismamente te cansas de quedarte siempre con las ganas de hacerlo.
Muchas veces al no hacerlo te puedes librar de negativas, dolor o comeduras de cabeza que podrían llegar más adelante.
Ahora bien, ¿qué pasa si lo haces y todo sale como esperabas o incluso mejor? ¿Qué te impide no hacerlo? Nada dura eternamente, sí, te puedes equivocar, pero¿qué más da? La recompesa vale más que todos esos miedos que puedas tener.
Asique a partir de ahora, pienso hacer las cosas a mi manera, ¿que fallo? Pues mala suerte, ya vendrán nuevas oportunidades.
Habrá trenes que sólo pasen una vez y hay que estar dispuestos a cogerlos, pero si lo pierdes, recuerda que hay muchas más estaciones que te pueden llevar a sitios que no hubieras pensado hasta ahora.

sábado, 19 de octubre de 2013

Mi pequeña.

Qué decir de ésta pequeña gran persona llamada Andrea, que vino un día como el que no quiere la cosa, y actualmente se ha convertido en una de mis mejores amigas.
Creo que lo primero que tengo que agradecerte, es que seas mi amiga, y eso también quiere decir, que me aguantes, y que pese todo lo que te he podido contar o hacer, nunca me hayas juzgado.
Hace poco te comenté, que en breves hacíamos un año desde aquel día, que sin saberlo, nos iba a unir de tal manera. Despertaste en mí, mi sentido más "protector", en el sentido de que puedo llegar a ser capaz de hundir a aquél que se atreva a intentar hacerte daño y sabes que no me hace falta ir con las otras dos personas qué tú y yo sabemos jajaja
Siempre te he considerado como mi hermana pequeña, no me preguntes el por qué, ni yo misma lo sé, y por otra parte, quería agradecerte todo lo que has hecho por mí últimamente, ya sea animarme, presentarme a gente para que pudiera olvidar a otra o también que hayas confiado en mi para contarme tus cosas.
Eres una de las personas por las cuáles estaría dispuesta a quitarme a mí, para dártelo a tí sencillamente porque creo que te lo mereces. Muchas veces me gustaría que te vieras con mis ojos, aunque sean de color caca cómo te digo siempre, para que te aprecies realmente y veas cómo eres, no sólo físicamente que ya sabes que para mí eres perfecta, sino también por cómo eres, porque a pesar de que la gente o incluso tu misma puedas llegar a pensar que eres infantil, créeme que no, todo lo contrario, ni muchos adultos tienen la capacidad de reacción para muchas cosas como tú.
Creo que sabes de sobra que siempre siempre vas a poder contar conmigo para todo y que en cuánto estés mal, no tienes ni que preguntar, directamente te desahogas conmigo y te intentaré ayudar en lo que pueda.
Hemos vivido bastantes cosas juntas, y compartido también secretos, pero aunque suene típico, se que esto va para largo, porque por mucho que ahora intenten separarnos, se que no podrán, y aparte no les dejaría, porque no soy de las que dejan marchar a personas tan sumamente increíbles como tú, es más, tendrían que tenerme envidia, por poder compartir tantísimas cosas contigo.
Tengo la sensación de que me estoy quedando corta y no me gusta nada, porque pienso que todo lo que hago es poco.....
Tengo muchísimas ganas de otra patata y de que me des uno de esos abrazos que sólo tú me das, al igual que tus buenos días putón/zorra o tus grabaciones, que hasta estando mal haces que me ría, que te quiero muchísimo y que cómo vuelva a pasar lo de hace meses de distanciarnos por esa tontería, te juro que voy a tu patio, me cuelo (ya sabes que no es muy difícil colarme) y me presento en tu casa para secuestrarte, ¿Te queda claro?
PD: Dile a Andreo que voy a necesitar sus 30 cm las próximas noches, es urgente.

Por cierto, espero que te acuerdes de la promesa que hicimos, la de no separarnos más, ¿Recuerdas?
Te quiero mi putilla.

Mi rubia.

Esta entrada va dirigida a una persona bastante especial para mí, a la cuál de una manera u otra le debía este pequeño homenaje que en cierto modo le voy a hacer ahora.
Dos años de diferencia es lo que nos llevamos, bueno, con ella es con la que menos, pero a pesar de eso, he podido comprobar que eso de la edad es sólo un número, y que parece que es una yo en pequeña y rubia. Tantas experiencias vividas de una forma casi idéntica, aunque bueno, sería mejor decir que vividas de una manera similar, me ha hecho darme cuenta que es una persona que pese a todo lo malo que le pueda pasar, siempre sale adelante.
He vivido momentos que jamás pensé que pasaría, y tú has formado parte de ellos, que sabes todas mis rayadas, locuras, y no te cansas, o eso espero, de escucharme y ver todas mis capturas, asique gracias por eso, de verdad.
Si me preguntáis por ella, no podría definir de una forma exacta que tipo de persona, o amiga en este caso es, pero puedo empezar diciendo que es increíble, tiene sus prontos, al igual que yo, y eso cuándo estamos de mala hostia no ayuda mucho, pero a las malas se que está ahí.
Después os diría que es una persona fuerte, aunque ella se empeñe en demostrar lo contrario, y ella no es consciente de lo mucho que vale.
En este tiempo que llevo con ella, dos años y pico de relación seria digamos, hemos vivido de todo, entre ello peleas, pero se suele decir que las amigas de verdad lo superan, como lo hicimos nosotras. Pero dejando aparte los malos rollos, no encuentro ningún momento que haya quedado con ella y me lo haya pasado mal, ¿Si tengo que llorar? Ella llora conmigo, ¿Si hay que reirse? Es la primera en dejarme sin aire para luego darmelo vía whatsapp, ¿Te da un infarto? Su culpa ¿Hay que salir corriendo? Es la primera que va detrás mía.
Con esto lo que quiero decir, es que un día te dije que estaría a las buenas y a las malas, y que sigo en el mismo sitio de siempre cuándo me necesites, que eres indispensable para mí y que aunque ahora estés de los nervios porque aún no te he pasado el parrafo, te quiero mucho.
Ahora viene la parte en la que te aconsejo, y bueno, sabes que te doy veinte mil mensajes, y que todos son que luches por lo que quieras, porque tu eres una persona que debería de salir a la calle a comerse el mundo, porqué sí, porqué tú puedes y punto, que no des explicaciones a nadie y que es mejor arrepentirse de algo hecho, que de quedarse con las ganas, si ves que las cosas te vienen grandes y te agobias, te ayudaré a que, como he dicho antes, salgas a comerte el mundo si hace falta a bocados. Serás rubia, pero no tienes ni un pelo de tonta, asique aqui estaremos para disfrutar de tooooodas las oportunidades que se te presenten, que te quiero mucho hostia puta ya.
PD: me es más fácil escribir sobre cosas determinadas que sobre personas, asique siento que este texto no esté a tu altura, pero hay personas cómo tú, que me dejan sin palabras, en resumidas cuentas es que me tendrás aquí para absolutamente todo, por muy loco que sea, y que te quiero, pero eso ya te lo demuestro día a día o eso espero. A echarle ovarios al asunto, que nosotras podemos y "antes muertas que sencillas" <3

Mi propia batalla silenciosa.

*Masoquismo: Actitud de persona que disfruta con el propio sufrimiento o lo practica.*

Hay relaciones y personas, que sin darte cuenta, te hacen daño, pero cuándo eres consciente de eso, y en vez de apartarte sigues en tus trece, llega a cierto modo un grado de masoquismo.
La gente que te quiere, piensa que el mejor consejo que te puede dar es que pases de dicha persona, pero el problema viene cuándo no puedes hacerlo o no quieres pasar pese a todo. Las razones que te dan suelen ser que no te conviene, que pasa de ti, no te merece, o que ya vendrán muchos más, pero ¿Qué pasa si sólo quieres eso? ¿Si aunque te haga daño con una vez que te hable ya olvidas todo lo malo? Sí, puede ser que poco a poco te vaya consumiendo hasta tal punto que dependas de esa persona para estar contento/a.
¿Y si pese a la negativa te ves con fuerza? ¿Por qué no intentarlo? Muchos dirán que así lo único que se hace es alargar una cosa inexistente y que sólo se consigue hacerse daño a uno mismo, pero si crees en tí y te demuestras a tí mismo que eres capaz de ello, ¿Quién se va a atrever a decirte lo contrario?
Por esto mismo, me considero una persona masoquista, no porque disfrute haciéndome daño, sino porque quiero a lo que me hace daño relativamente, pero ahora libraré mi batalla silenciosa hasta que llegue el día, que de la vuelta al asunto y vuelva a ser cómo antes, porque sí, porque yo puedo.

Obsesión

Me he tomado la molestia de ver que significa la palabra obsesión en la RAE y dice así "Idea fija y persistente que ocupa el pensamiento" ahora bien, ¿Eso no es lo que sentimos cuando nos enamoramos, o cómo se dice ahora, nos pillamos por alguien?
La gente puede tomarlo como algo negativo el obsesionarse por algo, pero aún más si lo haces por una persona, pero sin embargo, en los ejemplos que te da el diccionario de las palabras obsesión, obsesionar y obsesivo/a no lo describe como algo malo, aquí algunos ejemplos:
-Se obsesionó con sacarse el carné de conducir
-Tiene una obsesión por ganar la medalla
Si lo observas, todos hacen referencia a conseguir unos logros o metas, y tal y cómo lo veo yo, puede tener su parte positiva sin llegar a ser "enfermizo". Si obsesión significa eso según la RAE, entonces sí, soy una puta obsesiva por conseguir las cosas, entre las cuáles, te incluyo a tí.

Peor que acostumbrarse

Cuándo estás sola, es relativamente fácil acostumbrarse a eso, no tienes nada a que compararlo, lo peor es cuándo aparece alguien, al principio simplemente notas su presencia, pero ves que poco a poco esa presencia se está volviendo casi esencial para tí.
Entonces es cuándo te paras a pensar, y sabes que estás en ese punto en el cuál ya no hay marcha atrás, a llegado a tu vida y por mucho que quieras cambiarlo, es demasiado tarde, te estás acostumbrando a esa persona y te entran los miedos. Y te preguntas "Cuándo se vaya, ¿qué será de mí?, ¿Me podré acostumbrar de nuevo a estar sola?"
De ahí mi opinión, una persona se puede acostumbrar a una nueva casa, un nuevo trabajo, un nuevo país.... cosas que, sí, repercuten en tu vida diaria, pero..... Cuándo lo haces a una persona es distinto, digamos que es más inestable y que hay más contras de lo que uno se imagina. Lo peor entonces, es cuándo te tienes que desacostumbrar, porque ya has cogido el hábito de hablarle a todas horas, de confiarle todo de tí hasta que llega el maldito día, tus miedos se están cumpliendo, esa persona se ha ido y probablemente, aunque vuelva, no será lo mismo.
Yo lo defino como una auténtica putada de la cuál muy poca gente, por no decir nadie, está preparada, ya sea por una pérdida natural o porque simplemente se ha alejado de tí.
Ahora, es cuándo entiendo el verdadero significado de: "Hasta tu propia sombra, te abandona en la oscuridad"

Personas que cambian tu vida

Bueno, ¿A quién no le ha pasado eso de estar totalmente hundida/o y que aparezcan unas personas dispuestas a cambiarlo todo?
Pues eso a mi, me pasa continuamente, cuándo creía que ya la cosa no podía ir a peor, o que simplemente el sentimiento de soledad era el que predominaba sobre los demás, aparecieron ellas. Una a una, fueron quedándose parte de ellas en mí, hasta que un día, sin saber cómo ni por qué, las empecé a llamar mejores amigas.
Yo, una persona que se planteó ser totalmente independiente a lo que sentimientos se refería, volviendo a confiar... Ni yo misma me explico que ocurrió para que ese hecho se produjera.
Cuándo te pasas este tipo de cosas, cuesta volver a darlo todo por alguien, porque simplemente te has cansado de dar para no recibir (aunque no siempre es para recibir nada a cambio, sino que debería de ser siempre viceversa) o porque te han hecho tanto daño, que no te ves capaz de volver a pasar por eso, de contar tus cosas hasta tal punto de sentirse pequeña e indefensa.
Pero la relación se fue volviendo más sólida, la primera fue Claudia, una persona que la ves y puedes pensar "qué chica tan fría" pero que la conoces y vas sabiendo que vale muchísimo más por todo lo que te demuestra día a día sin darse cuenta.
Ella misma fue la que un día, en nuestra plaza, me dijo que venían dos chicas rubias, ahora, mis dos rubias, Noemí y Sandra. Que extraña situación..... Ya me había presentado a más amigas suyas sí, pero no me preguntéis por qué, me acabé "sabiendo su vida" y tener la necesidad de verlas día tras día. A su vez, Sandra vino con otra amiga, Laura, que aparentemente, es una persona callada, pero tal vez sea el hecho de que siempre esté sonriendo el que aporte esa dulzura o chispa en nuestro grupo...
Y oye, que no me olvido, y no porque sea la última significa que sea menos importante, tras venir de Galicia, una personita llamada Andrea, apareció por aquella callejuela hasta venir a nuestro banco, un encuentro raro pero que sin saberlo, iba a ser el inicio de todo, una persona que aunque esté mal, siempre me ha escuchado (o eso parece) y ha sabido estar ahí.
No me quiero explayar mucho, porque dentro de poco tendréis vuestra sorpresa, asique no me llaméis seca por ahora.
Este relato, ha sido una pequeña introducción de como empezó todo, nuestra historia, con sus más y con sus menos, pero que actualmente, está más sólida de lo que muchos piensan.... Simplemente, me paro a pensar en si pasara algo y nos distanciaramos y..... no lo veo, mejor dicho, no lo quiero ver, porque os habéis convertido en personas importantísimas para mí y no sabría que hacer sin vosotras, os quiero pequeñas.